La nueva conexión férrea entre las
ciudades capitales Berlín y Moscú, servicio cubierto en veinte
horas y catorce minutos, acortando en más de cuatro horas y media el
tiempo de viaje entre Alemania y Rusia, no solo que cruza cuatro
países, sino que a su vez, circula por vías de trochas (anchos de
vías) diferentes, 1.520 y 1.435 milímetros, lo particular es que
circula sin necesidad de realizar transbordos.
El tren cambia de ancho
automáticamente a su marcha y paso por la instalación que a tal
efecto, se ha construido en la ciudad bielorrusa de Brest, para ello
cumple un proceso que apenas necesita dos minutos por tren, frente a
las dos horas que antiguamente se necesitaban para cambiar los bogies
de cada coche.
Entre las ciudades de Moscú y Brest
las locomotoras rusas son las encargadas de dar tracción a los
trenes, sobre vías de ancho ruso; a partir de la ciudad de Brest y,
finalmente hasta la ciudad de Berlín, el tren circula sobre vías de
ancho estándar con tracción a través de locomotoras de operadora
polaca PKP.
El ahorro de tiempo ganado por cada
viaje es producto a éste cambio de trochas automático y el sistema
de pendulación natural de los trenes, que permite aumentar hasta un
25 por ciento la velocidad a la que se circula en las curvas sin
necesidad de invertir en infraestructuras, en promedio, cada tren
puede alcanzar una velocidad crucero de hasta 200km/hs.
Los trenes han sido equipados con un
nuevo sistema, desarrollado íntegramente por ingenieros españoles y
rusos de TALGO, que impide que ejes y rodales se congelen, gracias a
que reutiliza el aire caliente que la ventilación elimina de los
compartimentos de los pasajeros (viajeros) para dirigirlo a la
rodadura, evitando así la congelación y el empleo mínimo de
consumo de energía.
En lo relativo a la circulación a
velocidad alta en Alemania, los trenes están equipados con un
sistema de frenado mediante patín electromagnético que consiste en,
una barra de metal que se adhiere al carril tras ser energizada,
ayuda a reducir la velocidad mediante la fricción entre ambos.
En cuanto al sistema de cambio de
ancho que emplea TALGO, funciona con éxito desde hace décadas en
España para pasar del ancho de vía estándar al ibérico y
viceversa, es la primera vez que se explota comercialmente fuera de
territorio español.
Para este caso, el sistema cuenta
con tres mecanismos: unos soportes laterales en los que se apoya el
tren, de manera que las ruedas dejan de soportar su peso, unas guías
verticales que se encargan de activar los cerrojos de los rodales
para desbloquearlos y unas guías horizontales que empujan las ruedas
a la posición del nuevo ancho de vía.
Los tres mecanismos actúan
sucesivamente en donde, en primer lugar, las ruedas dejan de soportar
el peso del tren, tras lo que se produce el desbloqueo de los
cerrojos, y se cambia el ancho. Inmediatamente, se bloquean los
cerrojos, y las ruedas vuelven a soportar el peso del tren.
Fuente bibliográfica y de imagen: Revista Vía
libre. Artículo publicado el día 19 de diciembre de 2016.
(Fundación de los Ferrocarriles Españoles).
Luisem.-