Con un
contrato cuyo importe asciende a 163 millones de euros con un plazo de
ejecución de veinte meses, tras los cuales la velocidad máxima de los trenes de
mercancías será de 60 km/h y de 80 km/h la de los de viajeros, posibilitará el
aumento de la capacidad de transporte sobre la línea, cuya extensión es de 515
Km., hasta los veinte millones de toneladas anuales; a su vez, es la segunda
fase de un proyecto que se inició con unas actuaciones de emergencia para
asegurar las condiciones de seguridad en la explotación y la velocidad en el
tramo entre las ciudades de Dondo y Beira.
Para
ello será necesario ampliar las vías de cruce y apartadero en las estaciones y
mejorar los rieles para aumentar límites de velocidad.
La dicha
línea del Sena está fundamentalmente destinada al transporte de carbón de las
minas de Moatize da Vale y Río Tinto, manteniendo una reducida actividad de
transporte (tráfico) de pasajeros.
Los
trabajos incluyen la ampliación de varias estaciones (alrededor de 25) para
permitir cruces de Trenes de carbón que puedan duplicar los actuales límites;
hoy por hoy el límite está en trenes de 550 metros que, finalizadas las obras,
podrán circular formaciones que oscilan los 1.435 metros de longitud compuestos
por hasta seis locomotoras y cien vagones).
A su
vez, se prevé las mejoras en las condiciones de cuarenta puentes y veintiocho
pontones, uno de ellos es el conocido puente de Dona Ana, estructura de 3.877
metros de longitud sobre el río Zambeze construida en la década de los años 30
del pasado siglo, se sustituirá el carril existente, las traviesas de madera,
las fijaciones y los aparatos de dilatación, y se mejorarán los sistemas de seguridad.
Fuente:
Revista Vía Libre – 22 de octubre de 2014.
Luisem.-
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